ya sea en dictaduras o democracias. Por esa razón, cualquier mandatario que tenga los bolsillos llenos o las manos manchadas de sangre, debe enfrentar a la justicia; una justicia independiente, por cierto.
Chile tiene y retiene a Fujimori, como antes lo tuvo y retuvo Japón. Nuestro vecino del sur, a diferencia del de oriente, está tramitando expedientes de extradición. Chile debe entregar a Fujimori, como Inglaterra entregó a Pinochet. Luego, veremos los peruanos, cómo resolvemos nuestras heridas; pero, la larga mano de la justicia no debe quedarse corta con Fujimori. EL PERU, LO ESTA ESPERANDO. |